Hoy ha sido el National Cleaning Day en Freetown.
Este día de limpieza general se estableció para intentar
mitigar en alguna medida los problemas de salubridad de la ciudad.
Este año parecía que no iba a celebrarse (hacía ya 1 año y 7 meses desde el último día que se
celebró) por algún tipo de motivo que nadie parece entender o poder explicar
muy bien. El caso es que parece que la idea se retoma, probablemente en alguna
medida por la reciente epidemia de cólera que se ha sufrido en el país.
El cleaning day es un día realmente peculiar del que merece
la pena ser testigo.
Todos los ciudadanos están llamados ese día a limpiar en
profundidad, no solo sus casas, tiendas y negocios, sino también la parte de
calle que les corresponde. Desde primera hora de la mañana, todos, adultos y
niños, barren, friegan, acumulan residuos, desatascan alcantarillas, se
deshacen de la basura acumulada en sus casas, despejan de vertidos los ríos que
riegan la ciudad, y, en definitiva, tratan de despejar la ciudad de las toneladas
de basura con las que normalmente conviven sus ciudadanos.
La limpieza tiene lugar de 7 a 12 de la mañana, periodo
durante el cual está prohibido que circulen vehículos por las calles.
Probablemente, ese es otro de los motivos por los que este
día se le hace a una tan peculiar. La ausencia de tráfico en Freetown es como
aquella escena de “Abre los ojos” con la Gran Vía vacía por completo… inaudito!
También llama la atención la convicción con la que la
mayoría de personas se compromete con la tarea, con una mezcla de determinación
y alegría que es de lo más peculiar.
Quizá es por eso que uno no alcanza a comprender por qué el
concepto de “mantener limpio” no logra afianzarse en esta ciudad (y en el país
en general). Por qué una población dispuesta a semejante labor un sábado por la
mañana, encuentra tan difícil el sencillo gesto de no tirar absolutamente todo
al suelo, según caminan por las calles. Todo. Resulta muy curioso.
En este reportaje de la BBC se recogen algunas imágenes al
respecto:
Desde luego, en comparación con el resto del año, hoy la
ciudad da gusto.
¿Quizá merecería la pena hacerlo mensualmente en vez de una
vez al año? ¿y en todo el país en vez de sólo en Freetown?
De momento, yo disfruto mi tarde del sábado, con un delicioso zumo de frutas, a la orilla de una playa
de Lumley excepcionalmente limpia. Qué Gusto!
Impresionante el reportaje de la BBC.
ResponderEliminarTienes razón, ya lo decía mi abuela: "No es más limpio el que más limpia, sino el que menos mancha".